EL SECRETO DE LA MEMORIA Y LA REGENERACIÓN

Hace 270 Millones de años antes de que los primeros dinosaurios caminaran sobre nuestro planeta, aparecieron los ginkgo(exialoe lo tiene incorporados en   los batidos),
grandes árboles milenarios que sobrevivieron en jardines de templos budistas de China, Japón y Corea donde se consideran árboles sagrados.

La combinación del ginkgo junto con el Aloe ejerce un efecto sinérgico INIGUALABLE y todos sus componentes se potencian entre si y vitalizan de dentro hacia afuera. Favorece la concentración mental, irrigación y el aporte de oxigeno al cerebro; es un excelente preventivo de enfermedades degenerativas. También ayuda a  nuestra circulación periférica, siendo un gran aliado para nuestras piernas.
Destacado por ser un PODEROSO ANTIOXIDANTE que combate los radicales libres aumenta aportando oxigeno en la sangre que circula por nuestro cerebro.
Muy importante en la microcirculación periférica  ya que es muy útil para la prevención de molestias como el vértigo, la cefalea y molestos calambres y hormigueos en las piernas. 
También es útil para  mejorar las relaciones sexuales, al mejorar la circulación en los genitales también mejora, en el caso de los hombres la erección, y en el caso de las mujeres aumenta el flujo sanguíneo en su aparato reproductor.
Además, es una importante ayuda para las personas con diabetes ya que con la toma regular se puede prevenir los daños en los nervios y arterias, como las ulceraciones que se producen por no tener la enfermedad controlada. 


Numerosos estudios demuestran que tales beneficios se reflejan en la memoria y la capacidad mental, tanto en personas mayores como en jóvenes y en el caso de estas últimas por ejemplo ayuda con el esfuerzo mental en  época de estudios, ya sea en la capacidad de memorizar como en su capacidad de aprendizaje.
El aloe vera barbadensis miler entre sus propiedades “que son MUCHAS” encontramos su capacidad de regeneración e hidratación alcanzando las capas mas profundas de la piel;  su riqueza en POLISACARIDOS necesarios para mantener la estructura y firmeza de la piel, venas y arterias; gran depurador del organismo eliminando el exceso de toxinas y regenerador el sistema digestivo y de la piel, entre otras muchas propiedades como he mencionado anteriormente.
El Aloe era considerado en el antiguo Egipto como “La planta de la inmortalidad” incluyéndose en los embalsamientos y regalos que acompañaban a los faraones.

Si nos acostumbramos a incluir, en nuestro hábito diario un vaso de jugo de Aloe vera, solo o acompañado con ginkgo, nos proporcionara una gran movilización de nuestra circulación periférica y regeneración e hidratación de todo nuestro organismo.

Estas dos plantas milenarias nos aportan unos beneficios únicos para nuestra salud.

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